La historia de Yamaha comenzó cuando su fundador, Torakusu Yamaha, reparó un órgano de lámina roto en 1887. Poco después, completó con éxito el primer órgano de lámina que se construyó en Japón.
Desde entonces, Yamaha ha continuado produciendo productos de alta calidad combinando la artesanía tradicional con tecnología digital avanzada. La calidad del sonido producido por un instrumento musical Yamaha refleja los largos años de experiencia técnica acumulada y la habilidad artesana de la Compañía.
Con su experiencia y sensibilidad únicas, obtenidas de su devoción por el sonido y la música, el Grupo se compromete a crear entusiasmo e inspiración cultural junto a personas de todo el mundo.